AGUSTÍN Y LA FILOSOFÍA


AGUSTÍN Y LA FILOSOFÍA[1]
Como  punto   de partida del texto asignado, tomando como referencia a  San Agustín, traigo a colación como elemento importante, la práctica de la  amistad, denominada por los griegos “philía”. Este valor tan especial es para el gran pensador el  eje principal; dedicado a su gran amigo Romaniano, es la descripción que hace el obispo de Hipona, tomando como énfasis el valor de la amistad según el  escrito llamado el contra académicos, por otra parte cabe mencionar, las tres partes del filosofar como fundamento Platónico, la física como filosofía del ser, lógica como filosofía de la verdad y ética como filosofía del bien, estos aspectos hacen parte de la realización del hombre como modelo de la virtud.

Siguiendo el hilo conductor de la lectura, se puede describir dentro de los conocimientos básicos, que el valor de la amistad es un valor universal y también moral. Es la capacidad de afecto, donde la bondad y el desinterés son punto de partida para una sana y coherente convivencia, todo esto nace y se fortalece con el buen  trato y la tolerancia. Sin embargo San Agustín en el contra académicos se ve en la lucha con el escepticismo y el nihilismo negativo, “donde nada se puede constituir como verdad, todo vale” desde la perspectiva agustiniana busca hallar la calma dentro de esa tormenta que genera turbulencias de confusiones, todo esto es posible con  el valor y gozo de la verdad. “busquemos para encontrar pero encontraremos solo la capacidad de buscar al infinito”.

Haciendo una sinopsis de las tres partes del filosofar como fundamento Platónico, cabe resaltar la postura de Agustín frente a la deconstrucción, donde postula la física, Dios es la fuente del ser como creador, es decir que la física deviene de la teoría de creación. En lógica se convierte en teoría de la iluminación. En ética, Dios es la fuente de la bondad de los seres desde su gracia, estos tres aspectos hacen parte de la esencia de los comportamientos éticos y morales dentro de los  patrones y las conductas de los individuos.

Para concluir con esta reflexión, se tratará de llegar a una posible respuesta del arte del filosofar, puede servir, no tanto porque ella aporte la felicidad, sino porque nos beneficia a descubrir todos esos verdaderos  espejismos de la felicidad. De todos modos no sería viable reducir la filosofía meramente a esto: colocarla sencillamente al servicio de fines humanos. Como conclusión Los seres humanos como entes sociables buscamos de la amistad la ayuda incondicional, para aumentar las satisfacciones y disminuir las intranquilidades, gracias a la compañía y afecto. Por eso la amistad tiene algunos enfoques desde la perspectiva filosófica Según Aristóteles, algunas amistades se basan en la utilidad, otras en el placer y otras en la virtud, podríamos dejar la siguiente pregunta para reflexionar: ¿Soy realmente amigo de los que creo que son mis amigos?


[1] Gonzalo  Soto Posada,  Filosofía Medieval,La Patrística y los Padres de la Iglesia  (Bogotá: Universidad Pedagógica Nacional, 2007.), 319-324.

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